Ayer llovía cuando apague la luz de mi cuarto y esta mañana un tímido rayo de sol trataba de despertarme. No ha durado mucho su luz porque mientras preparaba el desayuno, unas nubes negras han tapado el trozo de cielo que soy capaz de ver desde mi habitación y ha comenzado de nuevo a llover y la lluvia se ha convertido en granizo y el granizo en nieve...
Me he metido a la ducha nevando, sin prisa, quería hacerlo con tranquilidad, con mimo, hoy es sábado y no tengo ningún plan aparente y es que aquí los planes me surgen de repente, sin esperarlos. Al salir de la ducha el sol brillaba con fuerza, he abierto las ventanas para ventilar y dejar pasar el aire frió de Lille.
Realmente ha sido un buen despertar, una mañana reconfortante, buena música entre rock y tangos seleccionada por mi ipod aleatoria mente, recuerdos fugaces de muchos de vosotros y una sonrisa. Besos para todos, hoy quizás me tome una cerveza a vuestra salud.


